* EDGE IS SMACKDOWN:
Se suele decir (y no sin acierto) que Raw es siempre una división muy difícil y complicada para cualquier wrestler por la saturación de estrellas que existen en su roster y la manera de politizar los main events, aunque llama mucho más la atención que un main eventer de sobra consagrado y 9 veces campeón mundial en la empresa como Edge haya acabado sufriendo, en parte, los mismos problemas para conseguir papeles de protagonista relevante dentro del roster rojo. Como si el canadiense ya hubiera "ligado" su personaje y su presencia escénica a las entrañas de Smackdown, Edge no lograba pasar de mero upper-midcarder en Raw sin oler un solo cinturón y sin ir más allá de roles bastante orientados al entertainment en más de una ocasión, como si de un "simple invitado en casa extraña" se tratara y contrastando muy mucho con la relevancia de su personaje solo unos meses antes en el show azul. De forma súbita y fugaz, el canadiense era "devuelto" a Smackdown en un movimiento de la empresa que la hace parecer estar de acuerdo con estas reflexiones y, nada más llegar, ya volvía a brillar como en sus mejores tiempos una vez volvía al que ya parece su "hogar" por derecho, aclamado a grito pelado por unos fans que, de paso, casi parecen haber "forzado" a la WWE a convertir al wrestler en babyface: en solo unas semanas Edge se aupaba al main event, se convertía en un personaje clave de las últimas storylines del show de los viernes y rozaba con las yemas de los dedos el que hubiera sido su décimo título mundial empatando contra Kane en el pasado Survivor Series, siendo aun posible que el wrestler logre esa meta de alzar por décima vez un campeonato mundial antes de su, por desgracia, relativamente próxima retirada profesional (ya que el feudo contra el Monstruo Rojo tiene visos de continuar y, por ello, es probable que Edge vuelva a disfrutar de alguna oportunidad más).
Edge declaraba recientemente que cada vez se siente más rígido y poco fluido en el ring, que cada lesión le pesa en el cuerpo como una losa y que (y esto lo vemos claramente) su última y complicadísima lesión en un tendón de Aquiles (de la que a punto estuvo de no volver y que tardó más de 9 meses en superar) le ha drenado gran parte de su habilidad sobre el ring, sobre todo a sus 37 años recientemente cumplidos. Por todo ello, y como decía más atrás, Edge declaraba tener la intención de poner fin a su carrera en, según sus palabras, 3 o 4 años más como mucho, siendo bastante evidente que, salvo cambios inesperados, acabe sus días en la que ya es su "marca-hogar" Smackdown, donde el canadiense se ha convertido por derecho propio en uno de los rostros principales de la división gracias a su excelente trabajo.
*¿OPORTUNIDAD PERDIDA DE UN BUEN TURN HEEL PARA JOHN CENA?:
Muchos hemos sido los que, en más de una ocasión, hemos fantaseado con un hipotético Turn Heel de John Cena, conscientes de lo bien que, probablemente, algo así le hubiera venido al wrestler en más de una ocasión pero conscientes también de los riesgos que, a nivel comercial y empresarial, una decisión como esa puede conllevar. De todos modos, la historia de Cena y los Nexus avanzaba semana tras semana y amenazaba de forma seria con materializar esa remota posibilidad. Cena perdía una apuesta personal con el grupo de rookies rebeldes que le llevaba a aceptar una unión al mismo sin concesiones, así como a aceptar las órdenes de su líder (Wade Barrett) con la amenaza de ser despedido de no acatar dichas condiciones, sembrando así de la forma más firme las posibilidades más serias que han existido durante años de materializar este hipotético Turn Heel; o era ahora o no sería nunca (o, al menos, por mucho tiempo).Sin embargo, con la perspectiva que da el paso del tiempo parece que todo este asunto se ha reducido a un "inocente coqueteo" que la compañía ha llevado a cabo jugando con esa posibilidad de poner en juego a un "Cena maligno", pero tampoco sin creérselo demasiado ni estar plenamente convencida de, finalmente, dar ese paso hasta la última de sus consecuencias. Cena ha formado parte de Nexus, si; Cena ha obedecido (en mayor o menos medida) a los Nexus, si; y Cena ha sido un Nexus más, de acuerdo... pero analizando la situación del personaje es evidente que, a pesar de todos esos severos lastres, Cena ha continuado siendo un Babyface recalcitrante como el que más durante cada minuto de su estancia en el grupo de rookies.
Mostrando todavía un miedo atroz a dar este "paso tabú" de una vez por todas, la WWE llevaba a cabo este guión pero sin atreverse a despojar a Cena del mismo atuendo de "héroe de los niños" que ha portado desde hace años. Lejos de obedecer a los Nexus como uno más, Cena nunca ha sido "uno más" dentro del grupo, llevando a cabo sus órdenes a regañadientes y siendo ninguneado y "humillado" por sus compañeros en la banda para acrecentar aún más su identidad Face que ayude a ir amasando unas ganas de "desquite" o de "venganza" totalmente acordes a la naturaleza del "bueno de la película". Siendo, teóricamente, uno más del grupo, sorprendía que, sin embargo, Cena nunca estuviera presente en los dos fracasados intentos que llevaban a cabo los Nexus de "conquistar" o de imponerse también en Smackdown, no logrando los mismos buenos resultados de dominancia que ya poseían en Raw pero, al fin y al cabo, incursionando en el show azul sin la presencia o ayuda del Marine, algo inexplicable si se supone que Cena era uno más de la banda y cuyo apoyo en esos momentos y para esas labores hubiera sido más que valioso. Sin duda otro "síntoma" más de que este anodino y experimental intento de "coqueteo" con un Turn Heel de su máxima estrella Babyface no ha sido más que eso: un amago, un "a ver que pasa" y un "ay, no me atrevo del todo", no siendo capaz jamás de hacer de Cena un Heel con todas las de la ley en ningún momento. Esta ambigüedad empezaba a molestar por momentos y los guionistas hacían bien en ponerle un punto final cuanto antes, sobre todo cuando la situación comenzaba a degenerar con salidas de tono de Cena hacia su líder y compañeros que resultaban poco creíbles en el contexto de la historia o de su situación dentro del clan.
Para ello, se ideaba una historia que, finalmente, acababa en el pasado Survivor Series con Cena libre de los Nexus pero a cambio de un muy alto precio: su despido de la WWE. Nadie en su sano juicio se cree que John Cena no vaya a volver tarde o temprano y que esto se deba a un tiempo libre que la compañía haya decidido darle al wrestler por motivos profesionales o personales (eso ya no lo sé); aunque sin embargo Cena logró dirigir unas emotivas y bien expresadas palabras de "despedida" (ja!) al día siguiente en Raw muy convincentes que demostraron su excelente capacidad con el micro (habilidad, esta si, que nadie puede negar, por poco que le agrade este luchador). Lo importante era que, más que de Cena, de lo que nos despedíamos en dicho Raw era de la mejor oportunidad en años que ha habido para llevar a cabo un convincente y bien trabajado Turn Heel que muchos piden y que a otros muchos nos gustaría presenciar para el wrestler, habiendo quedado bastante claro que el dinero y las ventas pesan bastante y que la compañía, a nivel empresarial, ha demostrado no tener el valor suficiente de pasar de un mero "coqueteo" con dicha posibilidad, siendo obvio que, finalmente, no ha sido capaz de materializarlo hasta la última de sus consecuencias y pareciendo incapaz de renunciar a este Cena babyface que tantas camisetas les hace vender.
La pasta es la pasta y no hay ganas de riesgo en este campo, al menos por ahora (tal vez en otra ocasión será).
* EL ATÍPICO (PERO BUEN) SURVIVOR SERIES 2010:
Pues bien, el tiempo se echaba encima y, por un momento, existió la rocambolesca posibilidad de asistir a un Survivor Series sin pelea eliminatoria por equipo tradicional de Survivor Series en su cartel. Para evitar el desaguisado a la compañía le bastaba con apañar a última hora un par de equipos basándose en la actual rivalidad entre Rey Mysterio y Alberto del Rio, y hala, ya tenemos "pelea tradicional eliminatoria" de Survivor Series (quien no se consuela es porque no quiere). Es más que evidente que el recientemente instaurado Bragging Rights (PPV con peleas también por equipos) esta haciendo mucho daño al ya veterano Survivor Series, sobre todo por la inexplicable decisión de celebrarlo tan próximo a las tradicionales fechas de este viejo programa de pago (uno de los 4 primeros PPV que la WWE ideaba en toda su historia).
No digo que Bragging Rights desaparezca, pero si considero lógico que se traslade a otras fechas que eviten que ambos PPV se eclipsen o se perjudiquen mutuamente. ¿Por que no pasar Bragging Rights a Mayo, por ejemplo?... No, mejor celebrar dos PPV que giran en torno a peleas por equipos de forma consecutiva y con solo un mes de diferencia entre ellos. Son decisiones que, difícilmente, le entran a uno en la cabeza. A pesar de ello, este PPV cuya pelea menos importante y más secundaria era la que daba título al evento (impresionante) acababa resultando más que correcto, estando para muchos entre los 3 o 4 mejores PPV que la WWE ha dado en el presente año. A destacar la increíble pelea entre Daniel Bryan y Ted DiBiase (si, otra vez Daniel Bryan), la que se montaron Sheamus y John Morrison y la protagonizada entre Kaval y Dolph Ziggler, de nuevo gran noticia cuando los mejores wrestler de la noche acababan siendo, los seis, jóvenes prácticamente recién llegados que, con su trabajo, nos están asegurando el futuro de la compañía en particular y del negocio en general.
* ÚLTIMOS DESPIDOS DE LA EMPRESA:
El pasado sábado 19 de Noviembre nos levantábamos con la noticia de varios nuevos despidos en la WWE, cuyos nombres, a excepción de un par de ellos, lo cierto es que tampoco me sorprendieron bastante. Son los siguientes:
- Shad Gaspard.- Impresionante la línea descendente que ha dibujado este wrestler durante los últimos meses de permanencia en la compañía. Tras separarse de su compañero JTG siendo el, aparentemente, luchador con más futuro de la pareja (y tras, por cierto, no lograr ningún título de dúos junto a él en las filas de los Cryme Tyme), Shad era pusheado de forma importante para acabar rayando muy por debajo de lo esperado, lo que le llevaba a ser devuelto al territorio de desarrollo de la compañía para pulir y perfeccionar su estilo. Tras una temporada en dicho territorio de desarrollo, a Shad ni siquiera se le ha dado la oportunidad de demostrar lo que ha mejorado retornando a televisión, sino que acaban poniéndole directamente en la cola del paro, de forma tan fulminante como impresionante. En lo que respecta a su compañero JTG, de momento conserva su empleo aunque al nivel de un jobber incapaz de anotarse victorias ni contra Chavo Guerrero (mal pintan las cosas también para este hombre).
- Vance Archer.- De futuro main eventer de TNA a fichaje de WWE que jamás acababa de cuajar, pesándole muchísimo a este hombre el poseer el mismo carisma que un ladrillo. Su estilo lentorro y rígido, unido a su absolutamente nula capacidad de conectar con el público, llevan finalmente a la WWE a prescindir de sus servicios, tras haber fracasado también en un último intento de cuajar haciendo pareja con Curt Hawkins (pareja que, irónicamente, no me desagradaba en sus primeras semanas juntos).
- Caylen Croft.- La compañía rompe a los llamados Dudebusters haciendo pagar el pato a Croft y dejando aun en los rosters a Trent Barretta, quien (al menos de momento) parece contar con cierto crédito de los directivos. A ver si logra aprovecharlo.
- Tiffany y Jillian Hall.- Dos Divas que ya no contaban absolutamente nada en los planes de los guionistas y que, en el caso de Hall, llevaba años estancada en papeles entertainment de nula aportación al espectáculo. Tiffany, por su parte, continúa siendo novia personal (y en la vida real) de Drew McIntyre, aunque sus evidentes carencias técnicas sobre el cuadrilátero han pesado mucho más a la hora de tomar la decisión.
- Luke Gallows.- Para mi el nombre más sorprendente y, a priori, inexplicable. En mi opinión Gallows parecía ser capaz de llegar a ser un powerhouse realmente convincente de otorgarle más preparación y experiencia, aunque probablemente al luchador le haya acabado pesando demasiado la saturación de powerhouses en las zonas medias y bajas de los rosters (con un Ezekiel Jackson que parece venir pisando fuerte en ese perfil y que parece también contar con muchas más esperanzas por parte de la empresa).
Edu - DW The Edu Files
http://wwefiles.blogspot.com/
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Muchísimas gracias Edu!
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con lo de John Cena, yo creo que era una gran oportunidad de romper los esquemas con un heel turn del Marine y, con perdón, se han giñado.
Gran análisis como siempre Edu. Me ha gstado mucho lo que has dicho sobre los despidos.
ResponderEliminarLa verdad es que me da rabia el despido de Luke Gallows. Tras el despido de Serena (parace mentira lo que la chica hizo por el grupo) y la lesión de Mercury, la SES se desmoronaba... ¡con lo fácil que hubiese sido hacer campeones por parejas, o al menos que hubiesen luchado juntos, él y CM Punk.
ResponderEliminarRecuerdo que durante 2 o 3 PPV's, los Hart Dinasty lucharon contra los Usos, ¿Tanto trabajo hubiese costado haber puesto a la SES?.
Mientras tanto, ellos, seguían desmoronándose contra un Big Show cuyo push aún no tiene un objetivo claro.
Y les dan el título a Cody Rhodes y a Drew Mcintyre, para quitárselos a la primera de cambio, desperdiciando dos parejas potenciales (SES y Hart Dinasty) de un plumazo... ¡Tiene narices, Mcmahon! ¡Después te preguntas pq descienden las audiencias y las ventas de tus PPV's!