20/8/11

The Edu Files: Agosto 2011

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Tras SummerSlam, vamos con una nueva columna de nuestro compañero Edu, quien analiza como andan las cosas tras el Mayor Evento del Verano en el que trascienden un par de ángulos por encima del resto. Adelante compañero!!!

* CONTROVERSY CREATES CASH:


(O "la controversia genera pasta"), frase que popularizaba el ínclito Eric Bischoff en sus días en la extinta WCW y que me sirve como pie para comenzar la columna de este mes, una vez más a colación de la actual situación que atraviesa John Cena en la WWE (tanto como luchador como personaje). Y es que, cuando alguien en el futuro eche la vista atrás y analice en que situación se encontraba el negocio en nuestros días, sin duda se encontrará, inevitablemente, con la figura de John Cena, cuyo curiosísimo caso ha pasado ya a los anales del Wrestling Profesional como el Top Babyface más abucheado de la historia. El fenómeno se las trae y no se recuerdan precedentes: si nos ceñimos a los mecanismos más "normales" que suelen regir esta industria, los wrestlers Face deben ser luchadores con una habilidad y carisma tales que les permitan arrastrar masas y ponerse a su favor a miles de fans, que automáticamente se sentirán identificados con el "chico bueno" de la película (dando así sentido al trabajo de los Heels a la hora de servirles como contrapunto). Por si eso fuera poco, si encima se trata del Top Babyface de una promoción, estas bases se amplían, incluso, a campos más allá de los meros cuadriláteros, pasando a ser la mismísima cara de la empresa y representándola en actos o campañas sociales de diversa índole. Cuando todo funciona según los parámetros más "old school" de esta industria, así es como funcionan las cosas; sin embargo nos encontramos ante una forma de entretenimiento que, afortunadamente, muchas veces resulta ingobernable e imprevisible, arrojando resultados y consecuencias que ni aquellos que desde arriba llevan las riendas pueden evitar (y en el fondo también por eso amamos este espectáculo).

John Cena, Top Babyface de la compañía, el "chico bueno", con más ética y con más moral por antonomasia de todo el roster, el modelo a seguir por los niños y el yerno deseado por las madres, resulta también, paradójicamente, uno de los wrestlers más abucheados de todo el roster en todo el mundo y desde hace ya años (y hasta me atrevería a afirmar que la cosa va en aumento). John Cena, un Top Babyface genérico y de libro, rompe totalmente ciertas "normas" (hasta ahora aparentemente obligadas para un wrestler face) viendo como millones de personas en todo el mundo no se identifican con él, disfrutan de cada derrota del luchador y desean fervientemente que pierda cada combate posible ese que, en teoría, esta diseñado y seleccionado para ser el "héroe de las masas". Con este panorama, nos encontramos como en cada arena a lo largo y ancho del mundo, John Cena divide a una audiencia que ha hecho ya famoso el cántico de "lets go Cena" (fans del wrestler) seguido por el "Cena sucks" (detractores del luchador). Si el equivalente de los aplausos para un face son los abucheos para un heel (un heel es mejor heel cuanto más abucheos logra arrancar de la audiencia), son muchos los que se preguntan porque entonces la WWE no es capaz de lanzarse de una vez a efectuar un turn heel de un wrestler que se intuye que funcionaría bien como heel (ya que la base de abucheos es ya enorme de por si)... pues bien, la respuesta es clara: Controversy Creates Cash.

El target de audiencia de John Cena es evidente: sus fans son, principalmente (y salvo alguna excepción), niños y niñas menores de 16 años que, cada mes, engrosan muy generosamente las arcas de la compañía gracias a la abundante venta de merchandising (camisetas, gorras, muñequeras, etc, etc). Hacer heel a John Cena ahora sería perder de un plumazo esa amplia base de mercado que tanto dinero le está proporcionando a la WWE en estos momentos (momentos de crisis, recordemos), ya que la práctica totalidad de esos niños y niñas dejarían de comprar merchandising disgustados con el nuevo giro de su "héroe favorito", haciendo descender así de forma dramática los ingresos en ese concepto para la compañía. Por otro lado, la empresa tendría que quebrarse un poco la cabeza para encontrar al nuevo Top Babyface que suplantara a Cena en la gran cantidad de actividades que semejante "cargo" aporta, cuando es mucho más fácil dejar las cosas como están y seguir ingresando beneficios. Si, son muchos los que claman o los que, incluso, no entienden como John Cena puede seguir siendo un Babyface con semejante (y ruidosa) cantidad de gente que le detesta, pero es obvio que a la compañía le interesa mantener esta actual situación de controversia en las arenas para seguir generando beneficios. A la WWE le conviene mantener en los estadios los gritos de "Lets go Cena, Cena sucks", porque esa controversia le sigue aportando muchísimos beneficios económicos cada día, por eso es de esperar que siga manteniendo al wrestler como babyface durante mucho mas tiempo.

*UN BUEN VERANO:


Con la celebración de dos PPV consecutivos que han brillado por encima de la media de calidad ("Summerslam" y, sobre todo, "Money in the Bank"), con la consagración de CM Punk como una de las mejores cosas que le han pasado al Wrestling Profesional en los últimos 10 años, con Alberto del Rio alcanzando su "destino" de ser World Champion (concretamente Campeón de la WWE) justo un año después de su debut en la WWE y con la puesta en marcha de un par de storylines bastante atractivas y acertadas, lo cierto es que podemos afirmar que la WWE atraviesa un momento bastante bueno, y que el verano que aun nos encontramos atravesando está resultando francamente decente. Probablemente aun sea pronto para afirmar que nos encontramos viviendo un posible final de la llamada "Era PG" (de la que hablaba en la columna anterior y cuyo proceso, de existir, sería muy lento y gradual), pero lo que si es cierto es que por algo se empieza, y que basta echarle un ojo a los últimos shows para comprobar como el tiempo dedicado al "entertainment familiar" se ha reducido de una forma bestial, siendo exclusivamente el Wrestling el único protagonista de los programas que la WWE nos ha ofrecido en los últimos meses (algo que solo puedo considerar como muy positivo). Hornswoggle y similares son ya un pálido recuerdo mientras que el Wrestling y las promos dominan la totalidad de los 90 minutos que duran los Raw y los Smackdown de los últimos meses, algo que, repito, me satisface muchísimo como fan y como espectador.

Nos vamos a Smackdown y analizamos la storyline principal que discurre actualmente en los shows de los viernes y que, como sabemos, se centra en la rivalidad entre Randy Orton y Christian (tras su aun reciente turn heel). El comienzo del feudo fue altamente satisfactorio cuando Christian, frustrado por el hecho de perder en solo 5 días un primer título mundial que al canadiense le costaba 16 años conseguir por una absurda e improvisada decisión del Manager General, se dejaba llevar por la ira, la impotencia y el cabreo, hasta el punto de cambiar su actitud afable y respetuosa para convertirse en alguien más destructivo, envidioso, retorcido y negativo. El turn heel fue muy bien llevado, todo el mundo comprendió este cambio de actitud de Christian dadas sus circunstancias, y eso hizo que la historia despegara de forma muy satisfactoria. Sin embargo, es cierto que la rivalidad daba visos de comenzar a estancarse levemente y a perder un poco de interés después de un par de meses en el candelero. En el momento exacto, e impidiendo que el feudo se estancara ya del todo, la WWE introducía un nuevo elemento que revitalizaba totalmente el guión en el pasado Summerslam: Edge, amigo desde la infancia de Christian (también en la vida real y ya retirado del Wrestling Profesional), aparecía en escena en lo que parecía que iba a ser un intento de Christian de tener un apoyo en su esquina aprovechando que su pelea contra Randy Orton sería un No Holds Barred que le permitiría que su amigo le echara un guante, sabiendo que dicha modalidad de combate carece de descalificaciones. Sin embargo, Edge sorprendía a propios y extraños echándole la bronca a su amigo y dejándole totalmente solo en la pelea. Edge afirmaba a Christian comprender su actitud pero le reprendía diciéndole que ese no era el camino, que debía volver a ser el que era antes y que, por muy consumido por la frustración y por la ira que se encuentre, ese no es su estilo. Finalmente, Edge rubricaba sus palabras diciéndole que solo un amigo de verdad, solo alguien que te quiere, es capaz de decirte cosas que te duelen solo por tu bien. Christian quedaba solo en el ring tocado moralmente y replanteándose su actual actitud, perdiendo de hecho el Título Mundial de los Pesos Pesados minutos más tarde frente a Randy Orton. De esta forma, y justo cuando la historia parecía empezar a estancarse, la WWE logra revitalizarla con esta "bronca" de Edge que hace tambalear los cimientos de su amigo Christian, del que ya esperamos comprobar si las palabras de su mejor amigo le influyen hasta el punto de cambiar su forma de actuar en el futuro. Acierto de la WWE introduciendo a Edge para inyectarle savia nueva a un guión justo cuando éste comenzaba a dar leves visos de monotonía.

Pasamos ahora a un Raw donde CM Punk parece haber removido el aletargado show rojo gracias a sus disputas sobre la renovación de contrato que, a la postre, parecen haber servido de revulsivo para que Raw, por primera vez en años, tenga ahora a priori algo más de interés que Smackdown (cuando la cosa ha venido siendo justo al revés desde tiempos inmemoriales). Summerslam acababa de forma caótica y dejando un montón de interrogantes alrededor de la marca que, planteados de forma correcta, nos inoculaban la casi necesidad de ver que ocurría en el Raw del día siguiente (y también los de las próximas semanas, por que no decirlo). Triple H oficiaba de árbitro en la contienda por el Campeonato de la WWE una vez John Cena y CM Punk se convertían ambos en campeones legítimos, intentando ser neutral en la pelea pero perjudicando seriamente a Cena cuando, sin darse cuenta de ello, le daba la victoria a Punk después de no percatarse de que Cena tocaba cuerdas con uno de sus pies en el conteo de tres que le daba la victoria al de Chicago (lo que, reglamentariamente, debería haber anulado dicha cuenta de tres). En mitad de la polémica, nada más ni nada menos que Kevin Nash aparecía de la nada y agredía a Punk dejándole totalmente noqueado con una de sus bestiales Powerbombs, poniéndole en bandeja el Título de la WWE a un Alberto del Rio que decidía muy sabiamente aprovechar la situación para canjear su maletín de Money in the Bank en ese momento, convirtiéndose así en el nuevo Campeón de la WWE. Tras todo esto, las incógnitas alrededor de Nash eran varias: ¿trabajaba Nash para Del Rio, mandado por este para agredir a cualquiera que se alzara campeón al final de la pelea y poder así canjear el maletín fácilmente?, ¿trabajaba para Triple H, duramente criticado y humillado por CM Punk y enviado por el Hunter a modo de escarmiento, haciéndole perder el título nada más ganarlo?, ¿trabajaba para Stephanie McMahon, vista en bastidores empeñada en que Cena ganara y retuviera el título por estar molesta con Punk por las burlas de éste hacia su familia, enviando así a Nash para fastidiar a Punk si ganaba una vez su esposo (Triple H) se negaba a utilizar el hecho de hacer de árbitro en la contienda para asegurarse de que Punk no acabara la noche como Campeón de la WWE? En el Raw siguiente solo supimos que Alberto del Rio y Kevin Nash no guardan relación alguna, y que Del Rio solo se aprovechó de lo ocurrido para canjear su maletín del Money in the Bank. Nash tomaba la palabra y aseguraba no trabajar para nadie, sino solo querer llamar la atención a lo grande para meter la cabeza en la empresa de alguna forma buscando un contrato (esta vez a costa de Punk), ya que se quedaba con ganas de retornar a la competición tras su breve participación en el Royal Rumble de Enero. A todo esto, Punk no se cree a Nash y afirma que, en realidad, fue enviado por Triple H, aunque Triple H lo niega y hasta reconoció y se disculpó en privado con Cena por su error en el arbitraje que le costaba el título al de Boston. En fin que, como debe ser, la historia esta llena de incógnitas que logran dejarnos pegados a los asientos cada lunes por la noche, algo que no se lograba con semejante intensidad en Raw desde hace bastante tiempo. Se especula que existen hasta 5 guiones diferentes alrededor de esta historia y que ni siquiera Nash ha firmado aun acuerdo en firme con la WWE, por lo que ni empresa ni luchadores conocen el final de la storyline ni saben realmente cuales serán sus destinos mientras llevan sus actuaciones a cabo de un show para otro. Esto arroja más realismo a la situación y hasta obliga a que, como en el pasado Raw, Punk y Nash tengan que improvisar sus promos en riguroso directo, aumentando aun más el interés de los shows para el espectador medio. Con este dato queda todo dicho: el momento que atravesamos actualmente en la WWE está resultando genial y, definitivamente, bastante "adictivo".


* NUEVA OLA DE DESPIDOS:


Hace algunas semanas la WWE volvía a hacer públicos los nombres de una serie de wrestlers de cuyos servicios decidía prescindir. Eran los siguientes:

- D. H. Smith.- Procedente de la extinta Dungeon (escuela de Wrestling del mítico Stu Hart, padre de Bret Hart) y portador de una depurada técnica como luchador, a Smith le ha pesado muchísimo su incapacidad para interpretar gimmicks más allá del típico "wresler genérico en bañador", cosa difícilmente tolerable en una empresa como la WWE que busca personajes atractivos y bien definidos, más allá de las obligadas habilidades sobre un ring.

- Chris Masters.- El caso de Masters es más sangrante porque este resulta ser su segundo despido de la compañía. El wrestler ya era despedido en el pasado (se rumorea que por el uso de esteroides y sustancias no permitidas por la política Wellness de la compañía, aunque este extremo no está confirmado), solo para ser recontratado pasado un tiempo y, tras no lograr cuajar en ninguno de los rosters, volver a ser despedido ahora de nuevo. Habría wrestlers que matarían por una segunda oportunidad con la WWE que Masters acabó siendo incapaz de aprovechar. En mi opinión, ni en la primera ni en la segunda vez que la WWE le contrata sé que vieron en un wrestler tan lleno de limitaciones y al que solo le salían realmente bien un par de moves (su Samoan Drop y una Full Nelson que, por ende, acababa siendo su finisher: el famoso Masterlock). Sospechoso ya que una simple llave sencilla que suele ser parte del setmove de cualquier pelea acabe siendo el finisher de un wrestler.

- Vladimir Kozlov.- Famoso por recibir un push astronómico que le llevaba a aparecer en carteles de PPV, ser main eventer peleando por títulos mundiales (que nunca ganó) y, lo más hiriente, a ganarle limpiamente al Enterrador en un Smackdown (show en el que el Taker accedió a hacerle el job a Kozlov solo para intentar afianzarle aun más como futura estrella de la compañía; impresionante resulta recordar eso ahora), el luchador acababa mostrando graves deficiencias que le hicieron decepcionar a la audiencia, a la compañía y a Triple H (su máximo defensor en vestuarios en un primer momento), alejándose de la órbita de cualquier título, cayendo en territorios midcarders y, posteriormente, acabando como lowcarder en papeles semi-entertainment como pareja de Santino Marella, previos a su despido. Su caso será recordado como el de una de las "promesas fallidas" con uno de los descensos a los abismos más rápidos que se recuerdan en la compañía.

- Melina.- Melina nos tenía acostumbrados a ser una "fija" en la órbita del Título de Divas, pero todo cambió cuando la luchadora sufría una grave lesión de rodilla que, tras obligarla a pasar por quirófano y a mantenerse alejada de los cuadriláteros durante bastantes meses, nos dejaba a una Melina muy alejada de lo que solía ser, convirtiéndose en una mera sombra de lo que una vez había sido. Eso la llevo a ejecutar peleas bastante pobres que la alejaron de cualquier opción a título. En un intento de revitalizar al personaje, Melina protagonizaba un turn heel que tampoco resultaba ser la solución, ya que ni como "chica mala" la luchadora lograba levantar cabeza y volver a ser lo que era. El caso de Melina tiene una particularidad muy a tener en cuenta, y es la de su unión sentimental en la vida real con John Morrison, otra hipotética "estrella futura" para la compañía y más que posible campeón mundial en cuestión de tiempo (si la cosa no se tuerce). Durante los primeros días posteriores al despido de su pareja, Morrison se ha visto en la extraña tesitura de verse obligado a comportarse de forma muy diplomática, mostrándose afectado por el despido de su novia pero, al mismo tiempo, debiendo expresarse con cautela para no atacar verbalmente a la empresa que, al fin y al cabo, le da de comer. Hay quien asegura que, al igual que sucedía en el pasado con Bobby Lashley y su pareja, Melina podría "dominar" totalmente a un Morrison que, a raíz de todo esto, hasta podría llegar a decidir no renovar con la WWE una vez expirara su contrato, decidiendo así marcharse con su pareja y abandonando un futuro en la WWE que pinta muy prometedor para él (cosa que le sucedía a Lashley hace algunos años). Este rumor se hacía bastante sólido cuando, tras su reciente reaparición tras una lesión de cuello, Morrison llegaba a encadenar hasta 5 derrotas consecutivas, dando alas a aquellos que aseguraban que el wrestler le podría haber expresado a la compañía su molestia por el despido de su novia y sus deseos de marcharse por ese motivo. Sin embargo, el rumor parece haber perdido algo de gas después de que el wrestler obtuviera dos victorias consecutivas, la primera en Summerslam en un Tag Team Match y la siguiente en el posterior Raw contra R-Truth, algo difícilmente compatible cuando un luchador empieza a no tener buenas relaciones con la compañía. El tiempo nos dirá hasta que punto son ciertos estos rumores alrededor de Melina y Morrison.

- Gail Kim.- Aunque no esta oficialmente despedida, su caso es realmente llamativo. La canadiense esta harta de no aparecer en televisión y de no ser tenida en cuenta por los guionistas para ser utilizada en storylines de ningún tipo, por lo que ha hecho oficial su petición a la WWE de ser liberada de su contrato y sus deseos de dejar la empresa (adornadas con ataques y quejas en Twitter afirmando que la WWE da tan pocos minutos a las Divas en televisión que difícilmente se puede cuajar un buen combate). Sin embargo, la WWE no "suelta" a la luchadora, pero igualmente sigue sin utilizarla absolutamente para nada en ningún show. Es probable que la empresa se encuentre esperando a que el contrato de Gail Kim simplemente expire para evitar el pago a la Diva de algún tipo de indemnización o similar, dejando a la luchadora "en el congelador", inactiva y sin planes hasta que llegue la fecha de fin de contrato (algo que cabrea mucho a una Kim que lo que realmente quiere es luchar cuanto antes, sea en WWE o sea en otra compañía).

- Jack Swagger.- Tampoco aun oficialmente despedido, su nombre sonó fuerte en rumores concernientes a nuevos despidos que, finalmente, parecen no haberse producido. En mi opinión, el despido de Swagger sería una de las mayores injusticias que la WWE podría llevar a cabo en este momento. Como defensor de Swagger que me considero, creo que sería un error dejar escapar a un wrestler con unas aptitudes tan valiosas dentro de un ring. Swagger ha sido capaz de llegar a ser una vez Campeón Mundial sobreponiéndose a un "lastre" tan determinante en una compañía como la WWE como es el de tener un físico tan poco "vendible" como el suyo, siendo enterrado poco después de aquello a consecuencia de un desacertado feudo contra Big Show que le perjudicó muchísimo, y en el que le embarcaban de forma francamente torpe (no sé quien sería el iluminado que tenía esa idea de enfeudarle con Big Show justo en aquel momento). La tecnica old-school/mat wrestling de Swagger, adornada por su sorprendente fuerza física, le convierten en un versátil luchador que gusta por convertirse automáticamente en el único representante del Wrestling más tradicional que existe actualmente en la WWE, ya que su estilo bebe directamente de las raíces de ese Wrestling técnico de toda la vida que jamás debería ser olvidado del todo y que siempre gusta presenciar al fan más tradicional (y todo, insisto, a pesar de su particular físico poco "vendible" a nivel comercial). Tiene mucho mérito lo que Swagger ha logrado en una compañía como la WWE que, a priori, suele buscar cosas tan diferentes a las que este luchador ofrece, por lo que su despido, según mi opinión, sería una injusticia mayúscula. En Raw vimos que Swagger parecía hacer amagos de comenzar una nueva storyline alrededor de Vickie Guerrero y Dolph Ziggler (ofreciéndole a Guerrero ser su manager), lo que resulta un detalle bastante esperanzador partiendo de la base de que, cuando tienen planes para ti y te "utilizan" en alguna historia, puede ser señal inequívoca de que, finalmente, no piensan despedirte (al menos de momento). Ojalá sea así.

Melina, Chris Masters, Vladimir Kozlov... ¿y como es posible que, en semejantes olas de despidos, gente tan denostada como JTG, Trent Barreta o Primo sigan en plantilla sin inmutarse?; pues tal vez porque, paradójicamente, lo que salve a estos wrestlers pueda ser, precisamente, sus status de jobbers. Toda compañía necesita un puñado de Jobbers como "base" en la que asentar a sus estrellas, y esta necesidad ineludible de jobbers en cualquier roster bien cimentado es la que, al final, sigue garantizando que JTG o Primo acaben conservando sus empleos (como actuales jobbers que son y, por ello, necesarios en la "pirámide jerárquica" del vestuario). Curioso, sin duda.


Edu – DW The Edu Files
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2 comentarios:

  1. El hecho es que está demostrado que el público adulto prefiere al antihéroe que al chico bueno de la película. Un ejemplo perfecto es el de la Guerra de las Galaxias, donde a todos les gustaba más Han Solo que Luke Skywalker.
    Es evidente que no pueden permitirse pasar a Heel a Cena, pero por eso han debido dar al público lo que quiere (a los dos públicos, adulto e infantil) : Un héroe y un antihéroe, Cena y Punk.

    Por otro lado, no estoy de acuerdo con la forma en que han llevado el feudo de Christian. Orton está empezando a parecerse demasiado a Cena, y Christian a perdido un status terrible, perdiendo el título de la forma que o ha perdido en las dos ocasiones.

    Por lo demás, genial tus comentarios como siempre, Edu.

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  2. Estoy de acuerdo con SebaUrbano sobre todo con lo del feudo orton-christian........y ademas yo es que a orton de face no lo veo.....es un heel sin duda alguna es mas creo que no sabe hacer el papael de face.

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